Dia 4 Navarra Roncesvalles– Olite – Cerco de Artajona – Monasterio de Irache – Estella – Puente la Reina.
Hoy amanecemos muy temprano como siempre en nuestros viajes.
La verdad que nos hemos alojado en un sitio muy bonito y cómodo, aunque no muy barato. Bueno tampoco ha sido de los más caros del viaje.
La verdad que en esta zona no hay mucho alojamiento. Yo pensaba que al ser inicio del Camino de Santiago sería fácil encontrar alojamiento. Pero estaba equivocada. Es un puebleicito muy pequeño. Bueno realmente creo que no es ni villa.
RONCESVALLES
El caso es que buscando en Booking (nuestro buscador de hoteles habitual) dimos con uno que se encontraba en pleno centro y fue todo un acierto, el Hotel Roncesvalles. Nos salió por unos 80€ la habitación doble. No recuerdo el precio exacto.Eso sí sin desayuno.
El hotel se encuentra pegado a la Colegiata de Roncesvalles por lo que su ubicación no puede ser mejor.
Las habitaciones son nuevas, cómodas y bonitas y además disponía de una pequeña cocina donde poder desayunar.
Así que tras madrugar y no desayunar en el hotel, porque creemos que es muy caro cargamos las cosas en el coche y hacemos el chek in.
Ayer cuando llegamos dimos una vuelta por el pueblo y vimos que no tenía gran cosa. Aunque hoy queremos dar una vuelta.
Nos encontramos la Estela del Camino. Una gran escultura de acero obra del escultor Faustino Aizcorbe. La estela del Camino representa el Camino de Santiago y las vivencias que experimentan los peregrinos en el. El color marrón simbolizan los caminos y senderos que recorren los peregrinos.
https://www.instagram.com/p/BRAV4jtg5a3/?taken-by=saltandopormimundo
Damos un paseo y mientras nos pensamos si merece la pena o no entrar en la Colegiata. Nosotros no tenemos mucha información y decidimos no entrar. Seguro que es preciosa, no lo dudamos pero nuestra ruta es dura 😉
Si creéis que debemos entrar dejadnos un comentario y prometemos volver.
Así que tras un paseo rápido por lo que creemos es lo más destacado de Roncesvalles nos montamos en el coche y empezamos la ruta.
Roncesvalles nos ha decepcionado. No se, nos la imaginábamos más grande. Más preparada para el turismo que creíamos que encontraríamos.
Pero se ve que desde aquí no salen muchos peregrinos.
Primera parada del día Olite y su majestuoso Castillo.
Nos separan unos 90 kilómetros y aproximadamente una hora y cuarto.
OLITE Y PALACIO REAL
Recorremos la distancia sin problemas, pero cuando quedan apenas 4 o 5 kilómetros para llegar a Olite……¿Sabéis qué nos pasa?
Se nos vuelve a encender la luz del aceite del coche!!!!!
Noooooooo. A ver qué hacemos.
Bueno paramos en una gasolinera y le contamos nuestro problema al de la gasolinera.
El hombre muy majo nos recomienda un aceite que es el que suelen llevar los coches del tipo del nuestro. La verdad que nosotros no tenemos ni idea de qué aceite llevamos en el coche! A partir de ahora nos fijaremos más, prometido.
El caso es que muy amablemente nos ayuda. Y cuando estamos haciendo tiempo para que se enfrié el motor y poder echar el aceite, vemos que en cuanto se ha quedado sin gente en la tienda sale a ayudarnos y él mismo nos echa el aceite! Pero qué hombre más majo!
La verdad es que nos ha salvado el día. Muchísimas gracias desde aquí si nos lees.
Una vez que nos han solucionado el problema, nos deshacemos en gracias con el hombre, proseguimos con la ruta.
Aunque ya esteremos todo el viaje pendientes no vuelve a saltarnos la alerta, así que parece ser que sólo estaba bajo el nivel de aceite y no tenemos ninguna fuga.
Paseando por las calles de Olite, Navarra.
Al final son cerca de las 12 de la mañana cuando llegamos al Castillo de Olite. Vamos, hora punta.
Así que cuando llegamos nos toca esperar un rato cola para poder entrar. Y es que ya se nota que estamos en una zona más turística que lo que estábamos viendo estos días.
Pero todos queremos ver este maravilloso castillo.
Tras pagar 7€ y una larga cola accedemos a uno de los Castillos mejor conservados de Navarra.
El lujo y la elegancia se perciben en cada rincón y es que no es de extrañar pues llegó a ser sede de la Corte en tiempos de Carlos III el noble.
Durante la Edad Medio la ciudad de Olite vivió con gran esplendor y prueba de ello es hoy el El Palacio Real de Olite.
En el año 1925, ocupa un tercio del casco urbano medieval y está considerado como uno de los castillos medievales mejor conservados.
En cuando cruzamos el patio de la entrada empezamos a sorprendernos de todo lo que ven nuestros ojos. Y es que cada rincón tiene algo que nos encanta.
Las vistas son increíbles desde casi cualquier punto.
Eso si es complicado hacerse fotos sin grupos enormes de turistas. Pero claro todos quieren ver esta maravilla al igual que nosotros.
La idea había sido llegar a primera hora para ahorrarnos las colas, pero esta vez no ha podido ser.
Es cierto que a mi por lo menos tanta gente me agobia. Por el barullo, la gente gritando y empujando. El problema de los sitios tan turísticos no es la gente en si, sino la falta de educación, que es mucha.
Bueno el caso es que seguimos recorriendo el castillo por cada rincón que nos dejan.
Y no son pocos los recovecos que encontramos.
Las fotos no son buenas entre las horadadas de turistas que nos encontramos y ademas el sol, a esta hora, está en lo mas alto, por lo que tampoco ayuda mucho.
En fin, hacemos lo que podemos.
Al final con paciencia conseguimos alguna foto vacía de turistas.
Nos encantará volver en otra época del año cuando la afluencia no sean tan elevada.
Echamos en falta alguna visita por el interior del castillo. No sabemos si por algo o es que habitualmente no se puede visitar su interior. Quizá sea sólo con visita guiada. No lo sabemos. El caso es que a pesar del tiempo que le dedicamos a recorrer su muralla y subir a todos sus torreones nos quedamos con ganas de conocer su interior.
Y mira que lo intentamos porque damos varias vueltas para ver si encontramos alguna puerta que nos lleve a su interior.
Pero recorremos una vez y otra los mismos caminos y los mismos torreones.
Una de las veces encontramos una exposición en una de las torres sobre el estado en el que quedó el castillo tras el abandono que sufrió.
Encontramos una maqueta de cómo quedó y los trabajos de restauración que fueron necesarios llevar a cabo.
La verdad es que se ha realizado un trabajo espectacular y nadie diría que el castillo que vemos hoy, un día estuvo derruido como en la maqueta. Un aplauso por todos esos restauradores y el gran trabajo que llevan a cabo para que podamos seguir disfrutando de maravillas como esta.
Cuando creemos que nuestras cámaras ya están lo suficientemente cargadas de fotos decidimos proseguir con la ruta.
Claro que antes alguna última vista de sus espectaculares vistas. Otra foto? 😉
La mañana está bastante avanzada, por no decir terminada y nuestros estómagos están que rugen.
Decidimos dar una vuelta por el pueblo para comer algo a base de pinchos, que ya sabéis que por esta zona se come muy bien.
Buscamos en nuestra app favorita, Tripadvisor para localizar algún lugar donde comer unos pinchos.
Nos metemos por la calle que nos indica. La calle por excelencia para comer.
Pero calle arriba, calle abajo no vemos nada donde comer. Nos aseguramos que estamos en la calle correcta. Y nada. Nos han debido cambiar la calle. Cuando ya nos cansamos de andar encontramos uno bastante cutre que no nos da mucha confianza. Así que pedimos un vino y un pincho cada uno y vamos tirando.
Nos encontramos la cabeza de un dragón. Nos imaginamos el escenario en el castillo con luchas contra dragones. Perfectamente podría ser un escenario de Juego de Tronos 😉
Al mismo tiempo nos recuerda algunos lugares de los que hemos visitado y le dedican especialmente atención a los dragones, como Libjuana en Eslovenia o Braga en Portugal donde vimos una bonita plaza con un dragón.
ARTAJONA Y SU CERCO MEDIEVAL
Continuamos con la ruta y 20 kilómetros después estamos en Artajona donde pretendemos ver su Cerco.
En Artajona nos encontramos la fortificación Medieval mas importante de la zona Media de Navarra.
Originalmente fueron 14 torreones de los cuales sólo quedan 9. Pero que están perfectamente restaurados.
Cuando prácticamente nos quedamos solos disfrutamos del lugar. Y es que es fácil que la imaginación empiece a volar con este entorno y empezamos a imaginar cómo serían las batallas en la Edad Media.
Aunque realmente se ve pronto y unas cuantas fotos por aquí y por allí y ya tenemos prisa por seguir visitando cosas.
Somos así de inquietos! 😉
La temperatura que hace hoy es buenísima. Nos sobran los abrigos y ya veis el solazo que hace. Así que da gusto pasear entre tanta maravilla.
Una vez que hemos hechos unas cuantas fotos (sólo unas poquitas, jajaja) decidimos poner rumbo al siguiente destino, Iraxte.
MONASTERIO DE IRAXTE Y FUENTE DEL VINO
Cuando llegamos al Monasterio de Irache nos lo encontramos cerrado. Vaya qué pena!
El caso es que no pone ni horarios ni nada, pero como es la hora de la comida decidimos volver más tarde.
Por un camino de tierra que sale muy cerquita nos acercamos a la fuente del vino.
Está fuente es una fuente de la empresa Bodegas Irache que estableció una fuente de vino donde los peregrinos pueden parar a beber un trago.
Aunque no seas peregrino, también puedes beber.
Aunque avisamos que el vino no es demasiado bueno. Pero es una fuente bastante curiosa, ¿o no?
Como es Monasterio está cerrado y no tenemos mucho más que hacer decidimos darnos un homenaje y nos vamos a comer a un restaurante cercano.
Ya sabéis que somos comer bocadillos y cosas más ligeras en nuestros viajes, a la hora de cenar es cuando cenamos más fuerte. Pero hoy nos lo merecemos. Así que buscamos en nuestro querido tripadvisor y nos lleva hacia el Restaurante Durvan.
Un restaurante que se encuentra en el propio pueblo y está como a unos 3 km.
Tenemos que decir que es todo un acierto. Comemos estupendamente y nos sale por 25€ por persona.(Aunque la calidad de las fotos deja mucho que desear…ups)
Así que una vez que ya podemos echarnos a rodar, rodamos hasta el coche para ver si el Monasterio ya está abierto. He de decir que ha caído una botella de vino, pero aquí la que escribe se ha sacrificado porque había que llevar el coche, así que imaginad quién se ha bebido casi una botella para él solito 😉
Cuando llegamos al Monasterio vemos que sólo se puede visitar un pequeño claustro que tiene, pero no se puede realizar la visita. No sabemos muy bien por qué. No hay ni cartel ni nadie a quien preguntar.
https://www.instagram.com/p/BG3fzsRJsj0/?taken-by=saltandopormimundo
Así que visitamos un poco lo podemos, que no es mucho y ponemos rumbo al siguiente punto de la ruta.
Hasta otra Monasterio de Irache. ¡Esta vez no ha podido ser!
ESTELLA
En apenas 15 minutos llegamos a Estella. Nuestra siguiente parada.
Aparcamos sin problema justo al lado de la estación. Y nos aseguramos que no hay que pagar. Es la hora de la comida y de momento no se paga. Así que nos vamos a conocer el pueblo.
Cuando llegamos la Oficina de turismo está cerrada y no abre hasta las 5. Así que empezamos a andar y nos dejamos llevar por nuestros pies, a ver que nos quieren descubrir.
En seguida empezamos a descubrir su casco antiguo. La verdad es que Estella sorprende por la cantidad de palacios antiguos que vamos encontrando por nuestro camino.
Pero como no tenemos mapa ni guía no sabemos muy bien qué es lo que vamos encontrando.
Además estamos un poco adormilados porque nos está dando el bajón típico de después de comer.
Paseando entre palacios nos encontramos la iglesia de Santa María Jus del Castillo, edificada sobre la antigua sinagoga.
Después nos dirigimos hacia el Antiguo convento de Santo Domingo donde tenemos unas vistas preciosas de toda Estella desde lo alto.
https://www.instagram.com/p/BHhbeDVgPZD/?taken-by=saltandopormimundo
Estamos un rato haciendo fotos. Después cruzamos el río Ega por el puente medieval que comunica la Judería con el barrio de san Miguel.
La verdad es que aunque tiene su encanto nosotros estamos amuermados y no disfrutamos mucho de la visita.
Subimos hasta un mirador que hay al otro lado de Estella donde tenemos unas bonitas vistas
Y desde aquí ponemos punto final a esta pequeña ruta por Estella.
Y así retornamos al coche y pasamos por la cale principal, la Calle del comercio que tiene su encanto y a estas horas rebosa de vida.
La verdad es que no nos ha entusiasmado demasiado y como tampoco teníamos plano no sabíamos muy bien que veíamos. Lo que está claro es que no se puede comer como hemos comido si luego pretendemos hacer turismo. Lección aprendida.
Ponemos el GPS y llegamos a la última visita del día al que llegamos en apenas 30 minutos, Puente la Reina.
PUENTE LA REINA
Puente la Reina es también una villa importante en paso del Camino de Santiago por juntarse aquí los dos caminos que vienen desde Francia. Se nota en la cantidad de peregrinos que nos encontramos.
La tradición dice que el nombre de Puente la Reina proviene del puente románico sobre el río Arga, que fue mandado construir en el siglo XI por una anónima reina de Navarra.
Cuando llegamos apenas queda luz para ver cómo se pone el sol.
También es cierto que estamos bastante cansados por el ajetreo que llevamos que no es poco.
Casas aledañas al Puente Medieval en Estella, Navarra.
Damos una vuelta por el pueblo y no tiene gran cosa. Es muy pequeñito. Lo peor que ya no queda luz para hacer fotos. Por lo que las focas que ya tenemos son de mala calidad ya que no disponíamos de trípode.
Llegamos a la Plaza Julián Mena donde se encuentra el Ayuntamiento y apenas hay gente. Aunque si que vemos varios peregrinos. ¡Llegamos a ver incluso a una mujer que iba descalza caminando por el empedrado!
Se nota que la temperatura a empezado a descender y la gente se cobija en sus casas con las chimeneas.
A nosotros nos dan mucha envidia y estamos muertos de frio y cansados. Así que decidimos dar por finalizada la visita de hoy.
Regresamos a Pamplona, donde descubrimos que nuestro hotel esta vez no está tan céntrico y está bastante más lejos de lo que pensábamos.
Descansamos un rato y tras una ducha reparadora, hablamos con nuestros amigos y descubrimos que están muy cerca de nuestro hotel. Si llega a ser por nosotros no hubiéramos salido por pereza. Pero ya habíamos quedado con ellos y nos tentaron con llevarnos y traernos al centro en coche, así que no pudimos negarnos.
Aunque terminamos disfrutando de la noche pamplonica un día más, pero no nos retiramos muy tarde porque todos estábamos cansados y mañana queríamos aprovechar el último día de visitas.
Pero eso ya es otra historia…..
Por si llegáis ahora aquí podéis leer el viaje completo:
Guía. Que ver Navarra en 5 días
- Día 1 Navarra – Madrid – Pamplona
- Día 2 Navarra – Pamplona – Sare – La Rhune – Zagarramurdi – Urdax – Elizondo – Almandoz
- Día 3 -Sant Jean de Pier de Port – Ezcaroz – Selva de Irati – Ochogavia- Mukilda – Roncesvalles
- Dia 4 – Olite – Cerco de Artajona – Monasterio de Irache – Estella – Puente la Reina
- Dia 5 – Pamplona – Castillo de Javier – Foz de Lumbier – Madrid
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