Dia 2 Algarve: Faro, playa de Faro y Loulé
Comienza nuestro primer día en Algarve.
Ayer llegamos tan cansados que no os conté lo que nos pasó.
Habíamos cogido un apartamento por AirBnb pensando que teníamos el apartamento para nosotros solos. Claro que era muy barato para los precios que rondaban, unos 400€ 8 noches.
El caso es que cuando llegamos no era apartamento, si no habitación en apartamento compartido. No nos gusta esto, porque nos gusta ir a nuestro aire. Pero bueno no resultó ser tan malo como pensábamos y además apenas pisábamos el apartamento para dormir por lo que apenas coincidimos con los dueños.
Damos unas vuelta con el coche antes de poner rumbo a Faro para desayunar.
Paramos en una cafetería-tienda, que aunque es muy bonita como tienda y tiene cosas chulas, como cafetería deja mucho que desear.
Nuestro primer destino del día es visitar Faro, la capital del Algarve.
FARO
En aproximadamente 40 minutos y 45 km después llegamos a Faro.
Desde el primer momento nos llama la atención el blanco de las casas y las fachadas descuidadas.
Con ese aire tan decadente que viéramos ayer en Lisboa y en nuestros anteriores viajes por Oporto y Coímbra.
A éstas horas encontramos una ciudad solitaria sin apenas transeúntes por sus calles.
No sabemos si será siempre así o es que aún es muy temprano.
Pero es una zona muy tranquila. Nos alegramos de no haber cogido aquí el alojamiento ya que parece que no hay ni un lugar para cenar o tomar algo.
Vamos paseando un poco sin rumbo dejándonos guiar por nuestros pasos.
Aunque yo tengo un objetivo que no voy a dejar pasar. Así que antes de adentrarnos en el casco viejo de la ciudad, al cual tenemos que acceder por una única puerta de acceso ya que se encuentra completamente amurallado, nos dirigimos a la Igreja Nossa Senhora do Carmo.
Una iglesia aparentemente normal, pero que en su interior guarda un pequeño secreto.
Como ya viéramos en Évora hace unos años aquí también encontramos una capilla cubierta de miles de huesos. Éstos se encuentran en peor estado de conservación que aquellos y puedes tocarlo los huesos sin ningún tipo de protección contribuyendo a su deterioro.
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Es un lugar un poco escalofriante pero teníamos que verlo.
La capilla está construida con más de 1000 huesos pertenecientes a monjes Carmelitas.
Aunque es algo curioso nos decepciona un poco el estado en el que se encuentra y los pocos medios que ponen aquí para conservarlo.
Sea como sea ya esta visto.
Así que ponemos rumbo a la puerta de entrada a la ciudad vieja por el Arco da Vila.
El interior del la muralla se llama Vila-Adentro.
Desde luego no se complicaron mucho con el nombre 😉
Las calles por aquí tienen un encanto especial, todas las paredes caladas en blanco y especialmente la tranquilidad que se respira a estas horas es totalmente recomendable.
En seguida nos encontramos con la catedral de Faro y queremos subir a su torre. Pero creemos que las vistas que hay no son muy espectaculares y la torre tampoco es demasiado alta, por lo que desestimamos subir.
Tampoco entramos. Ya volveremos luego.
Faro se encuentra dentro del Parque Natural de la Ría Formosa. Así que es recomendable una excursión por las islas para conocer y vivir un poco más desde dentro la Ría.
Nosotros queremos coger un barco, pero hoy cuando nos demos cuenta de la hora que es, cuando ya haya terminado nuestra visita por Faro, será demasiado tarde y no quedarán barcas disponibles. Pero como vamos a estar muchos días no nos preocupa demasiado, ya vendremos otro día a primera hora para cogerla.
Cerca de la Catedral nos encontramos este bonito mirador que no os podéis perder en Faro. Desde aquí podemos observar el Parque Natural de la Ría Formosa y en los próximos días nos adentraremos un poquito más en ella.
Faro es fotogénico y nos iremos encontrando numerosos rincones para fotografiar como este arco.
Poco a pocos vamos vamos recorriendo la fortificada ciudad de Faro.
Recorriendo la muralla de FAro, Algarve.
Se puede subir a un tramo de la muralla, y eso hicimos nosotros. Allá que nos subimos y recorrimos todo lo que nos dejaron, que vino a ser muy poco, pero que os dará otra perspectiva de la ciudad.
Aquí encontramos otra salida de la muralla, donde podemos salir y aprovechar a hacer unas bonitas fotos ya que desde aquí podemos recorrerla desde fuera.
Parece que están montando los foodtruck que tan de moda están en todas partes Estamos muertos de sed y hace mucho calor, así que a ver si encontramos una cerveza fresquita.
Pero parece que no tienen muchas ganas de trabajar ya que preguntamos en un par de sitios y nos dicen que no tienen cerveza. ¿Será verdad?
Así que con la decepción y la boca seca continuamos recorriendo estas callejas tan bonitas.
Faro nos ha gustado aunque nos hubiéramos quedado un ratito más, pero hace mucho calor y tenemos mucho sed, así que vamos a cruzar nuevamente el Arco da Vila y volvemos al Faro más actual, que de camino al coche recordamos haber visto alguna terraza.
Y efectivamente en la calle principal de camino al coche encontramos una terracita con toldo que tiene nuestro nombre y donde nos están esperando dos ricas Sagres para regular la temperatura de nuestro cuerpo con el calor sofocante que estamos sufriendo.
Y ya puestos nos entra el hambre y pedimos algo de picar. Unos “cachorros”, que son como llaman los portugueses a los Hot Dogs, y un rico paté de sardina, típico de la zona.
El paté costaba 1€, y aunque nos supo a poco estaba riquísimo.
PLAYA DE FARO
Tras haber repuesto fuerzas creemos que lo mejor es bajarlo dando un paseo por la Playa de Faro. Así que tras montarnos en el coche, tardamos apenas 10 minutos en llegar.
Nos cambiamos el bañador en el coche y a descansar un rato en la playa.
La playa es muy ancha y no hay demasiada gente, así que nos lo tomamos con calma.
Un rato de baño, tomar el sol, paseo, baño…
Pasan vendiendo un dulce típico, que no recuerdo el nombre, y como hemos comido poco decidimos probarlo. Es una especie de Bomba rellena de crema, y nunca mejor dicho. Bomba en toda regla, pero nada del otro mundo.
Como pega mucho el sol decidimos irnos al chiringuito a tomar otra Sagres bien fresquita. ¡Es que hace mucho calor y nos estamos tostando!
Después de la cervecita nos dedicamos a tomar el sol otro rato y en un momento que nos descuidamos llega una ola y nos empapa la toalla. Así que aprovechando la excusa, recogemos el chiringuito y ponemos rumbo al siguiente punto de la ruta.
Intentamos llegar al parque Natural de la Ría Formosa, que hemos leído que podemos ir en coche y hay una entrada cerca del puerto.
Pero el gps no está por la labor y nos pierde. Ni él mismo sabe donde está, y nos termina llevando a un cementerio de barcos. Un lugar un poco desolador.
LOULÉ
Ya sabéis que no siempre salen las cosas como planeamos, así que sin desilusión ninguna por no haber conseguido llegar al Parque Natural de Ria Formosa, ponemos rumbo a Loulé.
En apenas 20 minutos llegamos a Loulé.
Loulé es un pueblecito típico tradicional portugués.
Lo primero que nos llama la atención es su bonito mercado cubierto con los tejados en rojo y de inspiración árabe. Qué pena que esté cerrado y no podamos echar un ojo.
Los buzones de correos también nos llaman la atención como ya hiciera en nuestro viaje por Oporto.
Así que empezamos a callejear sin rumbo fijo. Pero antes hacemos una parada técnica para tomar unos cafés y unos Pasteis de Belem. Es que es la hora de merendar y desde la “comida” tenemos hambre. 😉
Recorremos algunas de sus calles e intentamos perdernos por sus callejuelas adoquinadas en piedra, pero la verdad que Loulé no nos motiva demasiado aunque hacemos algunas fotos. Pero realmente no tiene mucho.
Lo único descubrimos su castillo con la puesta de sol, lo que hace que sea un poco más bonito. Pero no nos ha hecho mucha gracia.
Durante este viaje veremos muchos atardeceres preciosos, pero el de hoy no lo será. O al menos no será de los más espectaculares.
Así que tras ver el atardecer ponemos rumbo a nuestra casa éstos días en Albufeira.
La zona en la que estamos es llamado como el Strip, como en las Vegas. Así que imaginaros lo que eso significa.
Escogimos Albufeira como base porque era el punto intermedio más o menos para desplazarnos por todo el Algarve, haciendo que las distancias no sean muy largas.
Pero no nos imaginábamos que esto era un estilo a Magaluf (Que no conocemos), con zonas de marcha, con música altísima, todo lleno de neones y mucho guiri borracho.
Por suerte nuestro apartamento está un poquito más arriba del Strip en una zona más tranquila llena de tiendas de souvenirs, por lo que podemos dormir tranquilamente.
Así que salir a cenar o a tomar algo no es difícil, lo difícil es elegir un sitio.
Como unas amigas están de viaje en la India y no hemos podido ir con ellas por mi situación, me dan mucha envidia así que como homenaje elegimos un Indio para cenar.
La cena riquísima y barata, como en todo Portugal.
Y después un rico Cóctel donde cenamos ayer.
Y con esto concluimos nuestro primer día en Algarve.
Sigue atento que mañana continúa la ruta.
Recorrido de hoy: Albufeira – Faro 40 min, 45 km – Playa de faro 16 minutos 9.6km – Loule – 24 minutos 19.6km – Albufeira – 29 min 32.4km Total 107km
No os perdáis la guía completa del viaje.
Guía completa. Que ver en el Algarve en 9 días:
- Día 1 Algarve: Mérida, Lisboa y Llegada a Albufeira, en Portugal.
- Día 2 Algarve: Faro, playa de Faro y Loulé.
- Día 3 Algarve: Lagos, Praia da Ponte da Piedra, Praia da Pinhâo, Portimao.
- Día 4 Algarve: Silves, Caldes de Monchique, Monchique, Aljezur, Praia de Arrifana
- Día 5 Algarve: Tavira, Ilha de Tavira, Praia do Barril
- Día 6 Algarve: Raposeira, Menhires de Milrei y Padrâo, Vila do Obispo, Sagres, Praia de Beliche y Cabo san Vicente
- Día 7 Algarve: Faro, Ilha Deserta, Cacela Velha.
- Día 8 Algarve: Estoi, Olhao, Praia de Benagil, Lagoa.
- Día 9 Algarve: Regreso a casa visitando Zafra y Trujillo
- 50 cosas que hacer en el Algarve, Portugal
- Vídeo resumen del viaje a Algarve
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