Dolmen de Dombate

Se trata de un monumento de época neolítica y es considerado como la “catedral del megalitismo” en Galicia.

Éste túmulo se estableció en en la primera mitad del IV milenio a. C., y la cámara a finales de esa misma época.

Se uso en diferentes épocas entre el 3800 a. C. y el 2700 a. C., cuando fue abandonado.

Hoy en día es una de las muestras más importantes del neolítico de nuestro país.

Fue descubierto por el arqueólogo José María Bello Diéguez  entre los años 1987 al 1989, quedando al aire libre y sufriendo un gran proceso de degradación, antes las diferentes administraciones públicas.

En las excavaciones realizadas por el profesor Bello en los últimos años, se ha descubierto que bajo este dolmen se encontraba otro aún más antiguo.

En 2012 se realizó una replica de la cámara principal, y en el año 2014 se encontraron grandes desperfectos en el neodolmen. Se musealizó el monumento y se limito el número de visitantes al día, para intentar conservarlo.

Hoy en día encontramos un museo donde nos cuentan más sobre el monumento y podemos visitar el dolmen. También vemos una restauracion de las pinturas que se encontraron en la cámara principal.

Antes de tu visita te animamos a asegurarte de los horarios de apertura, ya que dependen de la época y según tienen previsto algún evento. Aquí te dejamos la web donde puedes confirmarlo.

Nos parece una visita muy interesante y muy poco conocida.

 

Castro Borneiro

El castro de Borneiro es un poblado fortificado permanente, característico de la Edad de Hierro, Estuvo habitado entre los siglos IV a. C y I-II d.C. En el vivirían en torno a 300-400 personas, que se dedicaban principalmente a la agricultura y ganadería.

Presenta un complejo sistema de defensas con tres líneas de murallas y fosos.  Las murallas podrian disponer de una cerca de madera y tener una altura en algunos lugares, de más de cinco metros. Además aparecen dos puertas monumentales, una de ellas con un cuerpo de guardia. En el castro se pueden distinguir , en la parte superior, el recinto principal o “croa”, en donde se encuentran las construcciones domesticas, y el antecastro, dedicado a labores agrícolas. En la entrada principal, destacaba el barrio exterior, que sería un espacio balneario con un fin ritual.

Las viviendas eran los lugares donde las familias comían, dormían y realizaban las tareas cotidianas. En cada casa viviría una familia de entre cuatro y seis miembros. La unidad básica se basaba en el matrimonio.

Las casas estaban construidas en piedra con techos de materiales vegetales como ramas y paja, entrelazados. Tendrían alguna pequeña ventana y puerta de madera. Los suelos eran de tierra negra pisada  y en algunos casos  de enlosados de piedra.

Actualmente solo se conservan los cimientos y los arranques de las paredes de piedra  de las construcciones que, en origen, podrían alcanzar una altura de cuatro metros.

En las construcciones del castro también había cuadras, almacenes o incluso talleres de artesanos (herreros, alfareros, carpinteros, cesteros, etc).

En el poblado se encontraron abundantes herramientas y objetos de metal, principalmente de hierro y bronce, lo que confirma la posibilidad de que existiera un taller metalúrgico. El artesano fabricaría útiles metálicos para todo el poblado y además  los intercambiarían por productos agrícolas.

Dentro del poblado destaca la sauna que se localiza en el barrio exterior. La sauna presenta varias salas diferenciadas por su temperatura, entre las que destaca la zona de vapor y el horno.

Se supone que estos espacios, además de tener función balnearia, también tendrían un importante fin ritual, donde se harían celebraciones e incluso ritos dirigidos a toda la comunidad.

La visita al Castro de Borneiro es libre y no hay limitación de acceso. Es muy interesante y además gracias a los carteles que nos encontramos, entendemos un poco mejor cómo funcionaban y cómo era la vida en ese momento.

Muy interesante la visita y recomendable si estás por la zona.

Nosotros continuamos con nuestro viaje, recorriendo muchos otros lugares de Galicia.

Ruta de 13 días en coche, saliendo desde Madrid y recorriendo Salamanca, Galicia y una breve pincelada de Portugal.

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